miércoles, 27 de marzo de 2013

"Mamá" críticas


La idea original de Mamá proviene de un corto de su director, Andy Muschietti, en el que Guillermo del Toro se interesó hace unos años tras haber apadrinado El Orfanato. La historia de las niñas que vemos en la película se condensaba en tan solo tres minutos con una realización impecable y, Del Toro, haciéndose eco de las posibilidades del material, decidió apoyar al argentino Muschietti con una producción de lujo. Esta cinta se está convirtiendo en uno de los fenómenos de este primer trimestre cinematográfico: Mamá tiene aterrorizado a todo Estados unidos y llegaba este viernes a nuestros cines.
Mamá es la historia de dos niñas que desaparecieron tras la muerte de su madre en extrañas circunstancias. Esta coproducción se centra en el regreso de éstas a la vida social y en cómo Annabel (Jessica Chastain) lidia con unos extraños sucesos que las niñas han traído consigo. Los reclamos principales de la cinta eran la producción ejecutiva de Del Toro y la aparición de Chastain, nominada este año al Óscar a Mejor Actriz por Zero Dark Thirty (La noche más oscura). El primero sabe reconocer un buen potencial cuando lo huele, y en el caso de la actriz, es capaz de cuajar una buena interpretación en una película con muchos agujeros.



Un planteamiento clásico

Aunque no es ninguna maravilla, Mamá juega bien sus cartas y es muy eficaz dentro del género. Si la idea principal es pegar algún que otro bote, encogerse en la butaca del cine y aplastarle la mano a nuestro acompañante, la cinta lo consigue sin esfuerzo. Cuando empezamos a descubrir lo que pasa en pantalla, nos estremece cómo está rodado. Eso sí, el planteamiento es de lo más clásico y la película no tiene ningún afán rupturista. Su mejor baza es un apartado técnico impecable que llena (más o menos) una propuesta carente de consistencia temática. En algunos momentos, Mamá traiciona a su propia lógica e introduce lagunas que desconciertan, pero también incluye algunas escenas repletas de carga emocional (las de Chastain con las niñas) en las que se ve reflejado el leit-motiv que quería manejar Muschietti: el amor de una madre.

Fuera de los reclamos principales encontramos a dos actrices sobrenaturales: las niñas. Isabelle Nélisse (Lilly) y Megan Charpentier (Victoria) paralizan a cualquiera y su desarrollo a lo largo de la película es simplemente genial. Como decía Del Toro, los niños siempre son propicios a crear miedo, pero estas dos enanas estremecen. Al igual que la mayoría de películas de terror, Mamá funciona mucho mejor cuando sugiere pero no enseña, y cuando vemos explícitamente lo que antes solo podíamos imaginar, el globo se desinfla y apuesta por el susto a través de la monstruosidad. A todos estos fallos de Primero de Terror les sumamos los típicos comportamientos incomprensibles, como dejar a Chastain sola con las niñas o la obsesión de los personajes por investigar la cabaña en la que vivieron las niñas en plena noche.

Mamá

Como decía, es efectiva dentro del género, pero no es ni mucho menos genial. Sus primeros compases prometen consistencia, pero esa sensación de innovación se va deshinchando y tendemos que conformarnos con un pack de giros argumentales sin mucho sentido y unos cuantos sustos muy bien conseguidos. Ojalá hubiera seguido la línea de la primera media hora, pero nos quedamos con la actuación de las niñas y una Jessica Chastain que, aunque no pega mucho como rockera chunga, echa toda la leña al fuego y convence.

Lo mejor
La actuación de las dos niñas y su primera media hora prometedora con una atmósfera muy inquietante.
Lo peor
No se libra de sustos fáciles. Su guión tiene bastantes agujeros.

Un saludo :)

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